El presidente Javier Milei capitalizó una victoria estratégica en la Ciudad de Buenos Aires tras liderar personalmente la campaña de Manuel Adorni, vocero presidencial y ahora legislador electo. El resultado dejó al PRO en tercer lugar en su histórico bastión, un golpe directo a Mauricio Macri en plena antesala de las negociaciones nacionales rumbo a las próximas elecciones.
Desde el inicio, Milei se involucró de lleno: participó en spots, encabezó actos y se mostró públicamente con Adorni, incluso en inauguraciones de locales partidarios en Villa Lugano, Belgrano y en el cierre de campaña en Recoleta.
"Se pintó de violeta el bastión amarillo, y ahora tenemos que pintar el país", dijo el mandatario desde el búnker de La Libertad Avanza, acompañado por ministros y funcionarios de su gabinete.
En el escenario estuvieron figuras clave del Gobierno como Guillermo Francos, Patricia Bullrich, Luis Petri, Luis Caputo, Federico Sturzenegger y otros, en una fuerte señal de unidad libertaria.
El impacto sobre el PRO
La derrota del PRO —que obtuvo apenas el 15,94% con Silvia Lospennato como cabeza de lista— agudiza la crisis del partido fundado por Macri. El expresidente había endurecido su posición en las últimas semanas, incluso acusando al oficialismo de "maniobras de fraude electoral". Sin embargo, ahora el peso de la negociación cambió de manos.
En La Libertad Avanza consideran que el triunfo en CABA reconfigura la relación con el macrismo: "Después de haber perdido en su bastión, no quedan dudas: si se quieren sumar, va a tener que ser dentro de LLA", sostuvo un armador libertario en diálogo con Infobae.
El conflicto también alcanza la provincia de Buenos Aires, donde las conversaciones entre ambos espacios habían quedado en suspenso. Mientras el Gobierno impulsa una "fusión", desde el PRO preferían una coalición. Ahora, con los libertarios en posición de fuerza, todo apunta a una negociación en sus términos.
Movimientos internos y fracturas
La victoria también desató movimientos dentro del bloque macrista. Diputados como Diego Santilli y Guillermo Montenegro coquetean con el oficialismo. Incluso sectores ligados a Patricia Bullrich, que formalizó su pase a LLA, podrían romper con el PRO en el Congreso. Entre ellos están Gerardo Milman, Sabrina Ajmechet, Fernando Iglesias, Laura Rodríguez Machado y otros.
Algunos de estos legisladores analizan incorporarse al bloque de Gabriel Bornoroni, actual jefe de bancada de los libertarios, aunque las definiciones se tomarán en las próximas semanas.
Desde el oficialismo, el diagnóstico es claro: "La marca PRO no va más", resumió un colaborador cercano a Milei en la Cámara de Diputados.
